La Sierra de Cazorla es una de las cadenas montañosas que conforman la Cordillera Subbética. El pico más elevado de esta cordillera se encuentra localizado en el altiplano de la Sierra de la Sagra, muy próximo a Cazorla, que con 2.381 m. es la tercera cumbre más elevada del Sistema Bético, sólo superada por el Mulhacén y el Veleta. Cazorla no destaca especialmente por sus grandes cumbres, pero el Pico Gilillo, con 1.848 m. de altitud, es conocido como el "Balcón de los Valles", puesto que ofrece la mejor panorámica posible de este conjunto montañoso, protegido bajo la figura de Parque Natural.
|
Pico Gilillo desde La Cereceda (Cazorla, Jaén). |
Recuerdo cuando era niño que no me perdía un sólo capítulo de la serie de TV "El Hombre y La Tierra", y recuerdo especialmente las escenas grabadas por Félix Rodríguez de la Fuente en la Sierra de Cazorla. Muchas de aquellas imágenes se me quedaron grabadas y desde entonces siempre he querido venir algún día para explorar estas montañas.
|
Vista de Cazorla desde la entrada al Parque Natural. |
Aprovechando mi viaje desde la Sierra del Cabo de Gata, he querido acercarme por fin a conocer este increíble paraje. Y lo primero que me llamó la atención de estas montañas de naturaleza calcárea, que son la cabecera del río Guadalquivir, fue el perfil abrupto e irregular de sus cumbres, con fuertes pendientes que nunca hubiera imaginado en esta zona.
Por su situación geográfica y por su naturaleza calcárea, tenía conocimiento de que es esta sierra contaba con importantes yacimientos de fósiles, correspondientes al Oxfordiense del Jurásico Superior (unos 160 millones de años). Había oído hablar de la existencia de afloramientos de biohermos (bioconstrucciones) de espongiarios en la Sierra de Cazorla, pero nunca hubiera imaginado que en mi primera visita a estas montañas hubiera dado con uno de ellos.
|
Ammonites en calizas nodulosas rojas. |
Me entretuve un buen rato explorando el yacimiento en el que pude encontrar varias muestras de esponjas, crinoideos, equinoideos y ammonoideos. Tanto que casi se me hizo de noche antes de llegar a la cumbre del Gilillo. Decidí entonces pasar la noche en la misma cumbre, lo cual fue un gran acierto, por las vistas que me ofreció aquel lugar durante el ocaso.
|
Campamento en la base del Pico Girillo. |
Llegué a pisar la cumbre pasadas las nueve de la tarde, justo a tiempo para disfrutar del ocaso.
|
Ocaso en el Pico Girillo. |
La ascensión no ha sido muy exigente dada la escasa altitud de estas montañas, pero he tenido que salvar un profundo desnivel de casi 500 m. en apenas una hora, lo cual ha hecho que llegara "reventao" a la cumbre.
A la mañana siguiente me sorprendió un inmenso mar de nubes que cubría todo el horizonte.
Me recordó mucho a las madrugadas aquellas en los Picos de Europa, cuando me levantaba temprano y asomaba la cabeza desde la tienda para contemplar un inmenso mar de nubes. Este es especialmente llamativo porque cubre prácticamente toda la Meseta Sur.
Durante el descenso pude divisar a un grupo familiar de la Cabra Montés y, entrando ya en el bosque, sorprendí a una joven pareja de gamos.
Una vez que llegué al coche, recorrí la pista forestal que recorre todo el Parque Natural hasta llegar el nacimiento del río Guadalquivir.
|
Nacimiento del Río Guadalquivir. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario