jueves, 8 de diciembre de 2011

Escalada en la Placa de Las Nueve (El Tranco - La Pedriza).

La Serranía de La Pedriza es un laberinto tortuoso de rocas graníticas repartidas en un pequeño enclave a los pies de la Sierra de Guadarrama, en el Parque Regional de la Cuenca Alta del Río Manzanares. Es un paraje muy singular, muy diferente a lo que se puede observar por toda la sierra madrileña, caracterizado por la gran cantidad de formaciones graníticas de diversas formas que hacen volar la imaginación. Es el orgullo de los montañeros de Madrid y todo un paraíso para los aficionados a la escalada.


Hoy nos hemos ido a escalar a la Placa de Las Nueve, en la zona de El Tranco de La Pedriza. Se trata de una pared lisa muy exigente con vías de grado 6 o más. El día acompaña y cuando hemos llegado a la pared la teníamos entera para nosotros solos. Vamos a comenzar con la vía menos exigente de la pared y luego iremos pasando gradualmente a las más complicadas.

ZONA "PLACA DE LAS NUEVE":
Vía Nº 9 "¡Cómo pesa! (V+): Es la vía más asequible del risco. Me lanzo a subirla de 1º y con alguna dificultad a la mitad de la vía logro llegar a la reunión. Dany la sube de 2º y la desmonta.
Vía Nº 10 "Luna" (6a): Dany la sube de 1º y pasa dificultades en el tramo final de la vía, el más complicado. Yo la subo de 2º y hago el desmonte.
Vía Nº 8 "Esto funciona" (6a+): Efectivamente, esto funciona. Me lanzo a subirla de 1º pero me quedo en la 3ª chapa y tengo que bajar. Dany la resuelve sin problemas y yo la subo de 2º para realizar el desmonte. Comparte la misma reunión que la vía "¡Cómo pesa!".
Vía Nº 11 "Pluto" (6a): Todas las demás vías están ocupadas de modo que volvemos a la "Pluto" cuya reunión es compartida por la vía "Luna". La subo de 1º pero no logro chapar la 3ª, los pies de gato ¡no funcionan! No me lo puedo creer, pero no hay manera. Dany lo intenta y se queda en el mismo punto. Se desgasta las manos y los dedos del pie, pero nada. La única forma de subir es agarrarnos a la chapa. El resto de la vía, sin problemas, pero entre la 2ª y 3ª chapa más vale llevar unos pies de gato en condiciones. Yo la subí de 2º, pero si no es con la ayuda de Dany desde abajo no lo logro. ¡Vaya con la vía Pluto! ¿Serán nuestros pies de gato o las fuerzas que ya se han agotado?

¡Pedazo de pared! Esta fue nuestra primera exclamación en cuanto llegamos al risco a primera hora de la mañana. Toda la pared para nosotros. Al contrario que la última jornada, decidimos comenzar por la más asequible, la única vía inferior de 6 de toda la placa.

Allí está Dany en la reunión de la vía "Esto funciona", la 6a+. Esa fisura es una maravilla, pero se trata de una auténtica pared en vertical.

Esta pierna es la mía en uno de los desmontes de la placa.

A media mañana comenzaron a llegar más escaladores y pronto se ocuparon todas las vías.

Una perspectiva más desde el punto más alto de la vía "Esto funciona". Al otro lado, una chica sube por la vía "¡Cómo pesa!".

domingo, 4 de diciembre de 2011

Escalada en las Placas de El Halcón (La Pedriza), 2ª Jornada.

La Serranía de La Pedriza es un laberinto tortuoso de rocas graníticas repartidas en un pequeño enclave a los pies de la Sierra de Guadarrama, en el Parque Regional de la Cuenca Alta del Río Manzanares. Es un paraje muy singular, muy diferente a lo que se puede observar por toda la sierra madrileña, caracterizado por la gran cantidad de formaciones graníticas de diversas formas que hacen volar la imaginación. Es el orgullo de los montañeros de Madrid y todo un paraíso para los aficionados a la escalada.

Hoy hemos vuelto a la zona de El Tranco, que forma parte de la llamativa ladera que desciende del Yelmo hacia Manzanares El Real, repleta de canchos graníticos y grandes llambrias tumbadas como Las Placas de El Halcón. Nos dirigimos a la zona Musgogénesis Inferior (Sur) donde hay abundantes vías. La última vez que estuvimos aquí solo logramos escalar una de ellas, hoy vamos a por las demás.

ZONA "MUSGOGÉNESIS INFERIOR (SUR)":
Vía B "Directa a Salvadora Lobato" (6b+): Efectivamente, una 6b+, nos atrevemos con ella nada más empezar la jornada. Dany se lanza sin dudarlo a subirla de 1º, su primer paso es complicado, muy complicado, pero él logra superarlo sin demasiados problemas. Luego se atascó entre la 3ª y 4ª chapa y descendió. Yo lo intenté pero después de varias caídas no logré superar el primer paso. Dany lo volvió a intentar y esta vez sí, lo consiguió, de un tirón ha logrado subir su primera vía 6b+, y de 1º. A mí no me queda más remedio que volver a intentarlo, con la ventaja de que subo de 2º. Logré superar el primer paso y de un tirón pa arriba, mi primera 6b+. Hice el desmonte y bajé para celebrarlo con Dany.
Vía Nº 2 "La Patrona del voleibol" (V+): Se trata de una vía corta pero lisa, muy lisa. Yo la subí de 1º (con caída entre la 2ª y 3ª chapa) y Dany de 2º.
Vía Nº 6 "Salvad Las Tortugas de los Bacalas" (6a): Estupenda vía que discurre por un espolón barrido por una chorrera de musgos y líquenes. Dany logra subirla de 1º pasando algunos apuros en el tramo final de la vía. Yo la subí de 2º y realicé el desmonte.
Vía Nº 4 "La celulitis ataca de nuevo" (IV+): Al lado de la "Directa a Salvadora Lobato" hay cuatro vías que confluyen todas en la misma reunión. Yo ataqué ésta de 1º y Dany de 2º, pero después de subir dos vías de 6 fue como "coser y cantar".

Esta es una panorámica de nuestra primera vía 6b+, la "Directa a Salvadora Lobato". Puede apreciarse lo complicado del primer paso, que requiere un salto directo y un fuerte impulso con los pies en una posición casi increíble. Dany y yo estamos encantados de haber logrado subir esta complicada vía, que presenta además un paso totalmente liso entre la 3ª y 4ª chapa.

En el punto de reunión y antes de hacer el desmonte hice varias fotografías con el móvil. Si mi madre me ve aquí colgado me mata...

La vía está perfectamente equipada. Aquí la estoy desmontando.

Es increíble que estemos escalando en manga corta en pleno mes de diciembre.

Esta es la vía "La Patrona del voliebol", la V+ que yo subí de 1º. La subí tan confiado que entre la 2ª y 3ª chapa, cuando estaba a punto de chaparme, resbalé y caí un par de metros.

Aquí está Dany celebrando la consecución de la vía. Por cierto, ¿dónde se ha dejado el casco?


Y esta es la panorámica de la "Salvad las Tortugas de los bacalas", la vía 6a que logramos subir sin caídas. Su desmonte es especialmente complicado porque no tiene nada para apoyar los pies y descansar, hay que hacer toda la maniobra literalmente colgado.

Ha sido una de las jornadas de escalda más provechosas, hemos logrado subir dos vías de 6, nada menos.

domingo, 13 de noviembre de 2011

Escalada en la Cresta del Abantos (I): Pared de La Canal

San Lorenzo de El Escorial se encuentra rodeado por un circo de montañas pertenecientes a las últimas estribaciones de la Sierra de Guadarrama. Con una altitud de 1.758 m. el Monte Abantos constituye una enorme cresta granítica que confiere al paisaje local un carácter muy singular, motivo por el cual ha sido protegido por la figura legal de "Paisaje Pintoresco de Interés Nacional".

La zona de escalada del Monte Abantos se encuentra justo en la ladera oeste de la cresta, por debajo de La Solana de Enmedio, aquel mirador de la cresta que ofrece una panorámica inmejorable de San Lorenzo de El Escorial. El acceso es muy sencillo desde la carretera que sube al Puerto de Malagón (concretamente cogiendo el sendero GR10), pero nosotros lo hemos complicado más y hemos ido hasta el Pozo de Nieve (más allá del Puerto) para coger la pista que lleva a la Solana de Enmedio. Y si a eso le añadimos la persistente niebla pues más complicado todavía: Tardamos un par de horas en dar con la Pared de La Canal, la primera de las zonas de escalada del Monte Abantos.

Hoy nos acompaña Cristina, la novia de Dany, que viene dispuesta a grabarnos con la videocámara mientras nos enfrentamos a la pared. Suyas son también las fotos de este reportaje.

PARED DE LA CANAL:
Vía Nº 1 "Perrunas" (V): Intenté subirla de 1º pero no pasé de la tercera chapa. Hoy no es mi día. Dany la subió de 1º y sin rechistar. Yo la subí de 2º.
Vía Nº 2 "Aznar o Sadam, qué más da" (V+): Dany sube de primero y con las manos heladas; yo la subo de 2º y más tarde intento subirla de 1º, pero abandono justo antes de llegar a la reunión.

Dany ha subido las dos vías de 1º sin apenas dificultades. Es la primera vez que escalamos en medio de la niebla y con bastante frío, además estamos a unos 1.425 m. de altitud.

Esta pared no tiene nada que ver con las paredes de La Pedriza, mucho más lisas y limpias. Personalmente a mí me gustan más paredes como esta, más rugosas y con más agarres, repletas de musgos y líquenes que son valores naturales propios del enclave.

Pero esta pared es más expuesta, probablemente la más expuesta de las que hemos escalado hasta ahora, y no he sido capaz de quitarme de encima la sensación de vértigo en ninguna de las dos vías. Además el frío ha hecho lo suyo, la roca está helada y ello ha dificultado enormemente mi confianza en los pies de gato.

He escalado con frío, con inseguridad, con pasos lentos y poco precisos, pensándome demasiado cada movimiento. No he sido capaz de subir de 1º ninguna de las dos vías: Miedo a la caída. ¡Qué tontería! ¡Si voy asegurado! Menos mal que al menos las he subido de 2º porque si no, menudo desastre.

Espero andar más fino para la próxima: Nos esperan las vías de La Cresta, que están aquí al lado un poco más abajo.


sábado, 22 de octubre de 2011

Escalada en Las Placas de El Halcón (La Pedriza).

La Serranía de La Pedriza es un laberinto tortuoso de rocas graníticas repartidas en un pequeño enclave a los pies de la Sierra de Guadarrama, en el Parque Regional de la Cuenca Alta del Río Manzanares. Es un paraje muy singular, muy diferente a lo que se puede observar por toda la sierra madrileña, caracterizado por la gran cantidad de formaciones graníticas de diversas formas que hacen volar la imaginación. Es el orgullo de los montañeros de Madrid y todo un paraíso para los aficionados a la escalada.

Hoy nos acercamos a la zona de El Tranco, que forma parte de la llamativa ladera que desciende del Yelmo hacia Manzanares El Real, repleta de canchos graníticos y grandes llambrias tumbadas como Las Placas de El Halcón. Escalamos primero por la zona de "El Zócalo" y luego más arriba, en la zona Musgogénesis Inferior (Sur).

ZONA "EL ZÓCALO":
Vía Nº 26 "Nombre Desconocido" (IV): Iniciamos una vía de IV para calentar; Dany sube de 1º y baja diciendo que es demasiado simplona. Yo subo de 2º y en el punto de reunión desmonto la vía; ciertamente es bastante simplona.
Vía Nº 29 "Chipirón" (V): Dany sube de primero; se trata de una vía perfecta para nuestro nivel actual. Yo la subo de 2º y en la reunión desmonto la vía.
Vía Nº 30 "Ratones Trepadores" (IV): De IV nada, esta vía debería estar calificada como V, o como poco IV+, aunque tal vez mi percepción se deba a que la he subido de primero y me ha parecido más complicada de lo que es realmente. Sorpresa: En la reunión no hay argollas, y uno de los parabolts está flojo, baila bastante.

Mientras subimos la vía "Nombre Desconocido" unos veteranos escalan en "Ratones Trepadores".

Preparo el desmonte de la "Nombre Desconocido":

Reunión en la "Ratones Trepadores": No hay argollas y uno de los parabolts da mal rollo.

Dany no se fía y decide hacer el desmonte en la reunión de la vía "Chipirón" que está justo al lado.

Aunque es una operación complicada y poco prudente, intento obtener una panorámica desde este punto en la vía "Chipirón".

ZONA "MUSGOGÉNESIS INFERIOR (Sur)":
Vía Nº 8 "Las Joyas de Leganés" (6c+): Nos atrevemos con una 6c+, pero no logramos pasar de la primera chapa; la guía lo dice bien claro: "Máxima dificultad al inicio".
Vía Nº 9 "Raúl, Fiestas y Festejos" (V): Mucho más asequible para nuestro nivel. Yo la subo de primero y Dani de segundo. Intentamos equipar desde esta vía "Las Joyas de Leganés" para volver a intentarla de 2º, pero ni con esas...

Esta es una panorámica de la Zona Musgogénesis Inferior (Sur), donde hay multitud de vías interesantes.

jueves, 8 de septiembre de 2011

Escalada en el Cancho de Los Brezos, Barranco de los Huertos (La Pedriza).

La Serranía de La Pedriza es un laberinto tortuoso de rocas graníticas repartidas en un pequeño enclave a los pies de la Sierra de Guadarrama, en el Parque Regional de la Cuenca Alta del Río Manzanares. Es un paraje muy singular, muy diferente a lo que se puede observar por toda la sierra madrileña, caracterizado por la gran cantidad de formaciones graníticas de diversas formas que hacen volar la imaginación. Es el orgullo de los montañeros de Madrid y todo un paraíso para los aficionados a la escalada.

Es la primera vez que venimos a escalar a La Pedriza, de la que dicen es la mejor escuela de escalada de toda Europa. Por aquí hay más de 2.000 vías de escalada equipadas, con todo tipo de dificultades y longitudes, vamos, que hay variedad más que suficiente para poder elegir.

De momento Dany y yo nos centramos en buscar vías asequibles para nuestro nivel de iniciación, vías de IV, V ó V+, aunque no descartamos atacar alguna vía de grado 6 para ir perfeccionando poco a poco nuestra técnica.

Hoy por la tarde nos hemos acercado al Canto Cochino para subir al Cancho de los Brezos, en el Barranco de Los Huertos. Queremos escalar en las Placas Principales de Sector Iquierdo:

Vía "Por tol Musgay" (IV+): Una gozada de vía. Dany la sube de primero pero se atasca en la segunda chapa, se ha hecho daño en el dedo del pie. Finalmente yo la subo de primero y él de segundo.
Vía "Batucada" (V+): Dany lo intenta de primero y fracasa; entre la segunda y la tercera chapa hay un paso chunguísimo. Lo intento yo pero nada, tampoco soy capaz de pasar de la segunda chapa. Ambos nos encabezonamos en superarla pero nada, después de varias caídas abandonamos yo con las manos llenas de rasponazos y Dany con el dedo del pie destrozado.

Vía "Por tol musgay" en todo su esplendor. Muy lisa, pero asequible y disfrutona.

Desgraciadamente no hay tiempo para más; la tarde se nos ha echado encima, la noche acecha y no hemos traído frontales. Hay que recoger el material y descender al Canto Cochino antes de que la nos invada la oscuridad de la noche. La "Batucada" queda pendiente.

jueves, 1 de septiembre de 2011

Cuaderno de Campo del Trepearriscos.

Desde hace muchos años me acompaña en todas mis salidas a la montaña mi libreta de campo donde he tomado nota de todas las observaciones que he considerado relevantes. Es una herramienta imprescindible para todo naturalista y nunca ha faltado en uno de los bolsillos laterales de mi mochila. En ella describo todo tipo de observaciones sobre una gran cantidad de especies tanto animales como vegetales.

El contenido del cuaderno de campo es secuenciado (sigue la fecha del tiempo) y sistemático (las anotaciones siguen un diseño básico que se conserva anotación tras anotación), de modo que cada observación genera la unidad básica de todo cuaderno de campo: El Registro.

Son ya tantos los registros que aparecen en mi cuaderno de campo que ha llegado el momento de hacerlos públicos y nada mejor que elaborar un Blog para dedicarlo exclusivamente a relatar cada una de las observaciones. Las hay de todo tipo, desde la descripción de las huellas del Oso Pardo o de los excrementos del Urogallo Cantábrico, hasta la visualización de Rotíferos en las hojas de un musgo o de Poliquetos en las incrustaciones de algas marinas calcáreas, pasando por las observaciones de Rebecos, Corzos, Jabalíes, Lobos..., todo tipo de aves, reptiles, anfibios, artrópodos, invertebrados...

No faltan tampoco las observaciones relacionadas con todo tipo de plantas, desde algunas de las más representativas de la flora endémica de la Cordillera Cantábrica, hasta el descubrimiento de la Letharia vulpina en los Picos de Europa (un liquen escandinavo muy raro en la Península Ibérica) o la observación de plantas carníboras en las turberas cantábricas, pasando por la descripción de numerosos inventarios de vegetación realizados durante mi etapa de estudiante universitario, así como la elaboración de varios trabajos de investigación.

El Blog nace hoy con la idea de publicar todas las observaciones pasadas de mi cuaderno de campo e ir publicando las más actuales, de modo que queda mucho trabajo por delante, seguramente una labor de varios meses o quizás años de trabajo que algún día verán sus frutos cuando esté terminado y actualizado. Mientras tanto visítalo en:




domingo, 24 de julio de 2011

Escalada en el Risco de la Majadilla Verde.

El Risco de la Majadilla Verde constituye una de las zonas de escalada más destacables del entorno de Cercedilla, en la Sierra de Guadarrama. Está formado por granitos de alta montaña muy bien equipados para la práctica de la escalada deportiva.

Vía Nº 7 "Espolón Budita" (V-): Con anclajes químicos. Es la vía perfecta para iniciar la jornada, ideal para calentar. Sin problemas tanto de primero como de segundo.
Vía Nº 1 "Tos Tamos de Curso" (V): Al principio tiene un paso chunguillo, pero después es disfrutona, dan ganas de repetirla una y otra vez.
Vía Nº 3 "La Desconocida" (V): Otra de las vías disfrutonas. Practicamos las maniobras de descuelgue.
Vía Nº 4 "Antigua" (6a): Mi primera vía de grado 6, impresionante. El primer tramo es el más difícil, sin apenas agarres, solo un filoncito al que amarrarse con cuerpo y alma. Imprescindible confiar en los pies de gato y untarse bien las manos con magnesio.

El acceso al Risco de la Majadilla Verde se realiza desde la carretera que sube al Puerto de Navacerrada. A la altura del Mesón Fonda Real hay que desviarse a la izquierda y tomar el camino que llega al Embalse de Navalmedio. Justo allí sale una senda que cruza el arroyo y luego sube por el pinar directamente al risco.

Esta es la primera de las vías, el "Espolón Budita", equipada con anclajes químicos. No tiene ninguna complicación, de modo que es perfecta para calentar.

Vía "Tos Tamos de Curso", ni idea de por qué se llama así, pero es la más chula, dan ganas de repetirla.

El paraje es muy agradable, los riscos están rodeados por el bosque. En la imagen Cercedilla, y al fondo el Alto de Los Leones de la Sierra de Guadarrama.

Guille se prepara para afrontar la "Antigua", la vía 6a. Al principio se sufre, aunque yo lo pasé peor más arriba.

El filoncito es la única salvación, hay que amarrarse a él con todas las fuerzas; el resto es cosa de los pies de gato; la expresión de Guille lo dice todo... Una trepada auténtica.

Y la foto para el recuerdo: Los integrantes del Curso de Escalada en la última de las jornadas. De izquierda a derecha: El Treparriscos (o sea, yo), Gerardo, Guille, Daniel (el pequeño) y Dany.

sábado, 23 de julio de 2011

Escalada en Los Emburriaderos.

Los Emburriaderos son unos riscos graníticos que se encuentran en una de las laderas del Puerto de Navacerrada, en la parte alta de la Cuerda de Las Cabrillas, perteneciente a la Sierra de Guadarrama. Allí existen varias vías equipadas para la práctica de la Escalada Deportiva.

Efectivamente la Sierra de Madrid posee una treintena de zonas de escalada lo que la convierte en una de las mejores escuelas de escalada de Europa y probablemente no exista ninguna capital en el mundo que tenga tan próxima semejante cantidad de vías.

Este es uno de los motivos por los que por fin me he animado a iniciarme en la práctica de la Escalada Deportiva, el paso previo para la Escalada Clásica o de Varios Largos. Y lo he hecho a través de la Escuela de Montaña de la Federación Madrileña de Montañismo, que como todos los años imparte cursos especializados.

Después de dos sesiones completas en rocódromo toca por fin la prueba de fuego: Equiparse y "trepar" por las auténticas paredes de roca... Gerardo, nuestro instructor, nos lleva hoy a Los Emburriaderos.

Vía Nº 2 "Pitimba" (V): Ha sido la primera vía; he subido de primero y de segundo, sin problemas. Practicamos las maniobras de chapar, mosquetonear y el descuelgue.
Vía Nº 1 "La Pinturrillas" (V+): Pierdo la confianza en los Pies de Gato y me agarro con fuerza con las manos; al final me sudan tanto que resbalo y caigo. Mi compañero Dany me sujeta con el Grigri y todo queda en un susto y en un rasponazo en la mano izquierda. Mi primera caída.

viernes, 27 de mayo de 2011

El Cañón del Río Lobos.

Entre el Sistema Ibérico y la Alta Meseta del Duero discurre un pequeño río que a lo largo de unos 25 kilómetros ha excavado un profundo tajo sobre las calizas mesozoicas fruto de la erosión del propio cauce fluvial y de la disolución de la caliza, dejando a la vista grandes paredones de varias decenas de metros de elevación que sirven de refugio a una importante colonia de Buitres Leonados. Se trata del Cañón del Río Lobos, un inmenso karst con un sistema de aguas subterráneas, acuíferos, cuevas, simas y sumideros muy completo.

Aunque el río nace en la provincia de Burgos, el cañón discurre principalmente por la provincia de Soria, entre Hontoria del Pinar y Ucero. Actualmente el paraje posee dos figuras de protección: Es Parque Natural de Castilla y León desde 1985 y Zona de Especial Protección para las Aves desde 1987. Además de una asombrosa riqueza florística y faunística, el Cañón esconde un rincón mágico habitado desde la edad de bronce donde se ubica la ermita templaria de San Bartolomé, una construcción románica del siglo XIII.

Ayer por la tarde todo parecía indicar que se había acabado mi aventura por el Sistema Ibérico, no paró de llover en toda la tarde. A punto estuve de emprender camino de regreso a Madrid, pero algo me decía que esperara, que fuera paciente y que tuviera esperanza en que parase de llover. Y así fue, me acerqué con la furgona a la entrada del Cañón en Ucero y allí pasé la noche escuchando cómo caían chaparrones cada dos por tres.

Sin embargo de madrugada dejó de llover y aunque el día amaneció completamente nublado lo cierto es que no parecía que fuera a llover. Pero recorrer el Cañón del Río Lobos en bici después de tanta agua caída podría ser una práctica imposible, o que se pusiera a llover cuando estuviera metido en lo más profundo del cañón. Mientras desayunaba no hacía más que dudar y debatir, ¿qué hago? ¿Me arriesgo o no?

Estoy en la Poza de Valdecea, en el último aparcamiento de la entrada al cañón por Ucero. Lo primero que me ha llamado la atención es la presencia de aguas entancadas a lo largo del curso fluvial del río. Como se puede apreciar la poza está plagada de Nenúfares (Nuphar lutea) que sirven de posadero para una nutrida población de ranas comunes. Como estamos en primavera los nenúfares están el flor, al igual que la Espadaña fina (Iris pseudacorus), que presenta una hermosa flor amarilla.

He tenido tiempo de examinar la poza en profundidad, y además de las que he citado he podido reconocer Aneas (Typha latifolia) con sus largas espigas cilíndricas; Lentejas de Agua (Lemna minor), pequeñas plantitas flotantes; Juncos de Esteras (Juncus effusus)... Y observando con detenimiento en el agua pueden verse además de renacuajos, Nepas (Nepa rubra), pequeños insectos acuáticos más conocidos como Escorpiones de agua; y los típicos Zapateros (Gerris lacustris), los insectos que caminan sobre el agua. Los renacuajos probablemente pertenezcan a Sapillos pintojos (Discoglossus pictus).

A las 9:00 de la mañana ya estaba preparado y no lo dudé más: Agarré la bicicleta y me puse a pedalear hacia el corazón del cañón. Si llego al Puente de los Siete Ojos me daré por satisfecho, serán unos 10 km. de recorrido por el interior del cañón siguiendo el curso del río Lobos en sentido contrario. Desde el Puente de los Siete Ojos hasta Hontoria del Pinar el cañón se hace más intransitable en bici, además, el cauce está seco, por lo que el cañón ofrece menos atractivos y más incomodidades. Además el tiempo hoy no da para más, se va a poner a llover de un momento a otro.

Al primer lugar al que se llega es a la Ermita de San Bartolomé, una ermita de gran belleza construida por los templarios siguiendo claves esotéricas. Está ubicada en uno de los meandros del Río Lobos protegida por enormes cantiles. Se dice que este lugar es el "Omphalos", o "Centro del Mundo": Es el punto equidistante entre los dos extremos más septentrionales de la geofrafía peninsular.

Llama la atención comprobar que alrededor de la ermita persisten todavía varios olmos muertos afectados por la grafiosis.

Justo detrás de la ermita hay que cruzar un puentecillo de madera que cruza el río y permite acceder a la Cueva Grande, una enorme gruta donde persisten grabados y pinturas rupestres.

Ciertamente es un lugar mágico y confortable, no me extraña que esta cueva estuviera habitada durante el Neolítico, y seguro que fue utilizada por los templarios para realizar aquí algunos de sus rituales iniciáticos.


Después de esta parada obligada hay que continuar porque todavía queda mucho recorrido por delante. Mientras voy pedaleando he podido reconocer al Alcaudón Dorsirrojo, que después de un vuelo directo planea sobre los juncos de los estanques para saltar seguramente sobre alguna presa. Los Buitres Leonados están arriba, en los farallones rocosos, hay un montón de ellos, y también estoy reconociendo los gritos de las Chovas Piquirrojas.

Uno de los recursos tradicionalmente aprovechados en el Cañón del Río Lobos era la recogida de la miel. Existe un lugar conocido como "El Colmenar de los Frailes" donde la comunidad templaria albergaba colmenas fabricadas con troncos huecos de árboles que alineaban sobre los resaltes rocosos del cañón.

Y meandro tras meandro sigo el recorrido por la senda del Cañón del Río Lobos a lo largo de varios kilómetros. Cada dos por tres hay que bajarse de la bici para cruzar el río o para pasar por algún sedo, pero en general el recorrido es muy agradable y se pasa por lugares muy bonitos.

Por suerte el tiempo me está respetando y de momento no se ha puesto a llover, pero cada vez que miro hacia arriba da la sensación de que van a comenzar a caer gotas de un momento a otro.

Hay tramos en los que el río desaparece y vuelve a reaparecer misteriosamente más adelante, pero en la mayor parte del lecho las aguas permanecen estancadas.

Tras varios kilómetros más el cañón comienza a ensancharse poco a poco y se llega a una zona en la que hay que atravesar un espeso bosque de pinos y sabinas. Tras pasar el bosque se llega al Puente de los Siete Ojos, una construcción del siglo XVIII que salva las aguas del río lobos en períodos de estiaje.

En total he tardado una hora y media en recorrer los nueve kilómetros del cañón desde la Poza de Valdecea hasta el Puente de los Siete Ojos. Para el regreso he optado por ir por carretera, subiendo el Portillo hasta Santa Mª de las Hoyas para luego girar en dirección a Nafría de Ucero y Ucero. En total 13 kilómetros por carretera pasados por agua, porque desde Santa Mª de las Hoyas hasta Ucero me estuvo lloviendo prácticamente sin parar. Tuve tentaciones de subir a ver el Castillo de Ucero, pero al final me conformé con tirarle una buena fotografía.

Y aquí pongo punto final a mi aventura por el Sistema Ibérico: Cuatro días de turismo activo en los que he visitado lugares tan dispares como el Moncayo, el Desierto de las Bardenas Reales, el Urbión y el Cañón del Río Lobos, todo ello en los cuatro días de libertad que me he regalado este año.